El líder desactualizado
10/05/2005   Lecturas: 11.061

Catilina

Es el personaje central del anuncio en televisión de un proveedor de Internet, que es puesto en evidencia. Es un sujeto lleno de tics, de chistes de un pasado que no ha conseguido superar, y que se ríe de sus propias gracias sin encontrar la comprensión de sus semejantes. Pues ya ves truz ¡ja,ja,ja! ¿Cómorrrrr? ¡ja,ja,ja Cantidubi dubi dubi ¡ja,ja,ja! El caso es que se hace mucha gracia a sí mismo y se ríe abiertamente de sus ocurrencias ante un público sorprendido por su vaciedad pero, más que nada, por su anacronismo.

De alguna manera, cualquiera de nosotros ha sido alguna vez un hombre desactualizado, todos nos hemos visto, creo yo, colgados y agarrados a la brocha de un chiste o un dicho que ya no hacía gracia absolutamente a nadie. Víctimas de un leit motif que en su día llamó mucho nuestra atención, lo hemos interiorizado de manera tal que, cuando menos lo esperábamos, ha salido de nuestro inconsciente más profundo y sorprendiendo, y sorprendiéndonos incluso a nosotros mismos, lo hemos puesto en la palestra de manera tan innecesaria que quedamos inexorablemente en evidencia: ¿A que no es lo mismo tejidos y novedades que te jodes y no ves nada? ¡ja,ja,ja! Encantado de coño-certe ¡ja,ja,ja!. Es seguro que, en no pocas ocasiones, hemos estado rozando innecesariamente lo plebeyo. Mejor hubiera estado callado, nos abroncamos a nosotros mismos cuando nos hacemos conscientes de nuestra inoportunidad.

Para mí, el ejemplo más rutilante de hombre desactualizado de la actualidad es ZP, secretario general del partido político desactualizado por excelencia: el ZPSOE. Oír el discurso de este líder es volverse a la década de los setenta del siglo anterior. Cuida currutaco su imagen pública y se larga al mitin del partido con un pulligan de cuello vuelto que, queriendo parecer informal y obrero, le coloca en el pijerío de provincias de la España que daba la vuelta por aquellos años. Pero para el partido desactualizado, para un partido gran parte del cual se encuentra aún en la década de los veinte del siglo anterior, presentarse como de los setenta es ya un mérito considerable; Felipe González para este ZPSOE ni está ni se le espera, es como si no hubiera existido.

Tiene los mismos ojos que Paul Newman, exclama arrobada una entregada militante... Ocho años de derechas y un año de derechos ¡ja,ja,ja! Suma y sigue...